Ser el centro de atención y el motivo de conversación es el sueño de toda marca. El boca a boca lleva años siendo una de las estrategias tradicionales, orgánicas y más efectivas a la hora de darse a conocer siendo una empresa. Todos, como empresa, queremos que el público nos reconozca, hable sobre nosotros de forma positiva y natural, ¿verdad? En definitiva, queremos ser el “buzz” de conversación entre el público.
¿Qué es el Buzz Marketing?
Cuando hablamos de Buzz marketing nos referimos a un marketing viral, pero con ciertas peculiaridades, que pretende generar conversaciones y que sean los usuarios los que hablen sobre la marca de forma general o de un producto en concreto. Para ello, la clave radica en crear mensajes diferentes, originales y potentes; que lleven al cliente a comentar acerca de la empresa y recomendarla de forma natural, casi sin darse cuenta.
A pesar de llevar toda la vida en uso, el tradicional Buzz marketing o también llamado “Word-of-Mouth”, ha ido progresando e innovando a medida que han ido surgiendo nuevas posibilidades de generar conversaciones entre usuarios, gracias el desarrollo del mundo online. Los múltiples avances digitales, la expansión del uso de internet y RRSS se han convertido en grandes aliados de este tipo de estrategia. La elaboración de webs no oficiales sobre un producto, los blogs en los que se comentan servicios, las comunidades de consumidores online que conversan sobre sus experiencias sobre productos, etc. son algunas formas de lograr una mayor difusión de la marca.
La idea que se busca con estas conversaciones es que el mensaje que quiere transmitir la empresa llegue a través de los propios usuarios y no de ella. No es lo mismo que la marca hable bien sobre sí misma o de sus productos, a que lo hagan terceros, ¿no crees?
Las cuatro bases que lo sostienen
Son cuatro pilares en los que el Buzz marketing se basa. Que una marca se haga viral mayoritariamente por el boca a boca entre su público es todo un mérito, y nada fácil de lograr si estos no se tienen en cuenta a la hora de generar interacciones entre los productos.
- La curiosidad: Crear mensajes con misterio hace que los usuarios se interesen y quieran saber más. La mejor opción es crear una campaña de Buzz marketing que genere esta curiosidad en el usuario, que le haga preguntarse y comentar con los de su alrededor acerca del tema. “¿Qué empresa ha hecho esto?”, “¿qué será lo próximo que preparen?” …
- La confianza:Podemos afirmar que siempre confiamos más en el mensaje que nos llega de un amigo o un conocido, antes que en el que nos llega por parte de la propia marca. Al final, su objetivo es que consumamos sus productos, por lo que está claro que todo lo que nos cuente sobre estos va a ser positivo, lo que podría terminar provocando mayor inseguridad y desconfianza.
- El contenido, que deberá ser de calidad, llamativo, y atractivo. Si no cumple con estos tres requisitos, es muy improbable que alguien vaya a compartirlo con los demás.
- La viralidad:Su principal objetivo es lograr que el contenido se transmita por sí solo, sin necesidad de que la marca o la propia empresa que lo está promocionando y vendiendo tenga una participación activa.
Cuatro estrategias prácticas del Buzz Marketing
El contenido generado a la hora de seguir esta estrategia deberá ser lo suficientemente interesante, novedoso y llamativo como para que los usuarios hablen de ello naturalmente. Para esto, y teniendo en cuenta el interés de las marcas por esta estrategia y sus esfuerzos por desarrollarla cada vez más, son muchas las formas en las que podemos hacer uso del Buzz marketing en la actualidad.
Marketing de guerrilla
Creatividad, ingenio, innovación y todo lo contrario a convencionalismo. En eso se basa esta técnica de marketing. El objetivo es llegar a nuestro buyer persona de una forma completamente diferente a la que solemos estar acostumbrados. A través de medios no tradicionales, como por ejemplo graffitis, flash mobs o performances en lugares abiertos al público, se promociona un producto o servicio.
Marketing viral
Esta táctica se refiere a la creación de contenido que se comparte ampliamente en línea. Aprovechando la naturaleza social y viral de las rrss, se va creando el llamado efecto “bola de nieve” para la difusión del mensaje. Algunas de las claves para que esta estrategia resulte exitosa se basan en escoger correctamente la plataforma, el empleo de hashtags y copys originales, y el enfoque hacia lo que sabes que le gusta a tu público.
Marketing de contenidos
Este se enfoca en crear y compartir contenido relevante y valioso con su target. Lo que se pretende es crear una comunidad en línea y fomentar el compromiso del público con la marca, por medio de contenido que resulte interesante y de utilidad. Podcasts, posts especializados o vídeos son algunas formas de generar este tipo de contenido.
Marketing de influencers
Esta poderosa herramienta en el mundo digital está cobrando cada vez más protagonismo. Consiste en hacer llegar a los consumidores información acerca de un producto o servicio por medio de personas que tienen la capacidad de influir en la opinión de los demás. Instagram, TikTok, YouTube, Twitter… Son infinitas plataformas sociales en las que estos influencers se encuentran presentes; plataformas a las que cada vez damos más uso, tanto como forma de entretenimiento, como para descubrir nuevos productos y servicios.
Como ves, el Buzz marketing es una forma realmente efectiva de dar a conocer una marca. Eso sí, es fundamental emplear los ingredientes correctos y en el momento adecuado para que la estrategia cobre sentido y surte efecto. Lo mejor de ella es que cada una de sus acciones son completamente medibles, por lo que podemos disponer de toda la información necesaria para saber cómo está funcionando: a quién hemos llegado, en qué zonas geográficas, dónde y cuándo…
Y tú, ¿te atreves a probar con tu propia campaña de buzz?